Entre enero y mediados de julio de 2022 se han encargado 104 metaneros, superando el récord histórico alcanzado el año pasado con 86 unidades contratadas
1/9/2022 – Un total de 147 puertos de todo el mundo pueden suministrar gas natural licuado (GNL) como combustible a buques en la actualidad y se podrían alcanzar los 200 hacia final de 2024 gracias a la creciente demanda, según las estimaciones del analista marítimo Clarksons Research.
Europa lidera la infraestructura portuaria de abastecimiento de GNL, ya que la mayoría de sus principales puertos ofrecen este servicio, seguidos por los más importantes de Asia y América. Según los datos de Clarksons, en la actualidad existen más de 50 posibles proyectos para el suministro de GNL como combustible en todo el mundo, la mayoría de los cuales se encuentran en puertos europeos.
Este aumento en la capacidad se produce en un momento el que un 37% de los buques de la cartera de pedidos podrán utilizar este combustible alternativo, siendo la opción dual fuel (motores que pueden utilizar dos combustibles de manera indistinta con ligeras modificaciones en su configuración) la más utilizada en los buques de nueva construcción. Según Clarksons, la mayor penetración del GNL es debido a la experiencia adquirida durante décadas en su transporte y manipulación, que no se tiene en otras opciones de combustibles alternativos.
Como consecuencia, 2022 ha traído consigo un récord en los contratos de metaneros de nueva construcción. Entre enero y mediados de julio se han encargado 104 buques de transporte de GNL que en conjunto suman 17,4 millones de metros cúbicos de capacidad y tienen un valor estimado de 22.000 millones de dólares. Según Steve Gordon, director general de Clarksons, ya en el mes de julio se ha superado el récord histórico alcanzado el año pasado con 86 unidades contratadas.
Entre esas 104 unidades contratadas se incluyen más de 30 buques para cubrir las necesidades de Qatar en los próximos años: en 2025-2026 entrarán en funcionamiento en este país 116 millones de t anuales de capacidad de licuefacción, aunque también se han producido algunos pedidos especulativos y por necesidades de renovación de la flota (que probablemente se acelerarán aún más en la próxima década a medida que aumente la presión regulatoria).
Según datos de Clarksons, la flota de buques metaneros ha alcanzado las 691 unidades —621 de las cuales tienen más de 100.000 metros cúbicos de capacidad de carga—, con una capacidad total de 103,8 millones de metros cúbicos. El analista prevé un crecimiento de un 3,8% para este año 2022 y de un 4,6% para 2023. Hace diez años, la flota contaba con 362 buques y una capacidad de 51,9 millones de metros cúbicos. La cartera de pedidos asciende al 40% de la capacidad existente, frente al 27% de principios de 2021.
Para Steve Gordon, existen algunas incertidumbres en torno al impacto de las nuevas normas sobre eficiencia energética (EEXI) e intensidad de carbono en el sector, debido a que casi un tercio de la capacidad de la flota existente (32%) corresponde a buques de turbina de vapor.
Según el informe anual más reciente sobre el sector del GNL publicado por Clarksons, ‘LNG Trade & Transport’, los recientes acontecimientos geopolíticos, unidos a la creciente importancia para los Estados de contar con “seguridad energética”, han situado al sector del GNL en el centro de la atención mundial, impulsando aún más una tendencia de crecimiento ya establecida.