Advierte de que estas previsiones están sujetas a una extrema incertidumbre y dependen de factores difíciles de predecir
15/4/2020/ – El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que la economía mundial va a sufrir una contracción de un 3% en 2020 debido a los efectos de la pandemia del COVID-19, mucho peor que la registrada durante la crisis financiera de 2008. Estas previsiones son incluso peores para las economías avanzadas, para las que augura un descenso del 6,1% y desastrosas para España, que sufrirá la segunda mayor contracción entre las grandes economías de la zona Euro (-8%), solo por detrás de Italia (-9,2%).
Según ha señalado en su más reciente informe semestral ‘Perspectivas de la economía Mundial’ (World Economic Outlook, WEO) estas previsiones parten de un escenario base en el que se supone que la pandemia se disipa en el segundo semestre de 2020 y que las medidas de contención se levantan gradualmente. Sobre esta base, el informe proyecta una notable recuperación de la economía mundial para 2021, del 5,8%, conforme la actividad económica se normalice, gracias a las medidas aplicadas. La previsión para 2021 en España se quedaría en una recuperación del 4,3%, solo mayor que el de los Países Bajos (3,0%) y Finlandia (3,1%) en toda la zona euro.
Aún así, el FMI advierte que dichas previsiones “están sujetas a una extrema incertidumbre” ya que dependen de factores cuya evolución es “difícil de predecir”. En primer lugar, los puramente sanitarios, como el ritmo de contagio de esta pandemia, su intensidad o la eficacia de los esfuerzos para su contención, pero también influirán otros factores económicos y sociales.
Según las previsiones del Fondo, muchos países se enfrentan a crisis con múltiples facetas, que incluyen un shock de sus sistemas sanitarios, perturbaciones económicas internas, derrumbe de la demanda externa, cambios de sentido de los flujos de capital y colapso de los precios de las materias primas, por lo que “predominan los riesgos de que los resultados sean peores”, advierte el informe.
Las autoridades deberán aplicar importantes medidas concentradas enfocadas en el ámbito fiscal, monetario y financiero para respaldar a los hogares y empresas más afectados. Estas medidas ayudarán a mantener las estructuras económicas durante la paralización y serán esenciales para una normalización gradual de la actividad una vez que se disipe la pandemia.
Para el FMI será esencial “una estrecha cooperación multilateral” para superar los efectos de la pandemia, estableciendo ayudas internacionales para los países especialmente afectados, no solo por la crisis sanitaria sino también por la económica. “Es urgente que los países trabajen en forma mancomunada para frenar la propagación del virus y para desarrollar una vacuna y terapias contra la enfermedad. Hasta que estas soluciones médicas estén disponibles, ningún país estará a salvo de la pandemia, incluidos posibles rebrotes una vez superada la enfermedad si siguen produciéndose contagios en otros lugares”, concluye el informe.
El informe del FMI en inglés y sus apéndices estadísticos se puede descargar en la siguente página.