Los aranceles de hasta un 45,3% aprobados por la Unión Europea a la importación de vehículos eléctricos fabricados en China, han provocado un cambio de tendencia en el mercado de fletes de car carriers. Según el analista VesselsValue, “han afectado a la confianza del mercado y creado importantes obstáculos a los operadores”. Dichos aranceles entraron en vigor en noviembre, tras una investigación sobre subsidios estatales chinos a fabricantes de automóviles, y estarán vigentes al menos durante los próximo cinco años.
Según VesselsValue, el precio de las acciones de Wallenius Wilhelmsen, un importante operador del sector de los car carriers, sufrió una caída de casi un 20% a finales de octubre, tras la publicación de sus resultados financieros del tercer trimestre, aunque logró recuperarse parcialmente. Esto ocurrió después de que analistas destacaran previsiones más débiles para las ventas globales de automóviles. A pesar de ello, las proyecciones actualizadas de la empresa apuntan a otro año sólido en 2025, con un crecimiento del EBITDA estimado entre un 7% y un 12%.
A pesar del cambio de tendencia, hay indicios de que la demanda de transporte de vehículos desde China seguirá siendo suficiente para evitar un colapso de los fletes a corto y medio plazo. De hecho, VesselsValue ha identificado cerca de un millón de ‘automóviles en contenedores’ procedentes de China, que probablemente volverán al modelo ro-ro en 2025-2026, generando un impulso inesperado a la demanda.
Sin embargo, los fletes de transporte de vehículos ligeros de China a Europa han comenzado a debilitarse. Esto se debe a un crecimiento más lento de las exportaciones chinas y al aumento en las entregas de car carriers de nueva construcción. Entre ellos, el Hoegh Aurora, un PCTC (Pure Car and Truck Carrier) con capacidad para 9.100 CEU (Car Equivalent Units), entregado en agosto por China Merchant Heavy Industries a Höegh Autoliners, así como una flota de otros 30 PCTC encargados por COSCO y que está previsto que empiecen a operar antes de 2026.
China necesita a Europa más que a Estados Unidos
China domina el mercado automotriz global, con ventas anuales de aproximadamente 26 millones de unidades, lo que representa casi uno de cada tres automóviles vendidos a nivel mundial. Esto subraya el enorme potencial de China para continuar exportando.
Sin embargo, desde VesselsValue estiman que el aumento de aranceles impuesto por la UE a los vehículos eléctricos podría reducir la demanda de vehículos chinos a nivel global en aproximadamente un 10%. Esto equivale a una disminución del 2% en la demanda mundial, difícil de compensar en otros mercados. Además, la UE necesitará cooperar con China para encontrar soluciones inmediatas, si aspira a reducir un 55% las emisiones de CO2 para 2030 y alcanzar la neutralidad en carbono para 2035.
El sector de los car carriers se enfrenta a un periodo lleno de incertidumbres. Una cartera de pedidos equivalente al 39% de la flota existente añadirá un significativo 11% a la oferta de transporte, lo que afectará profundamente al mercado en 2025. Además, una resolución anticipada de la crisis del mar Rojo podría aumentar dicha oferta en un 6% adicional, un 17% en total, al reestablecerse las rutas a través del canal de Suez. Aunque este escenario es poco probable, podría desequilibrar el mercado hacia un exceso de oferta, presionando a la baja los fletes y el valor de los activos, y desencadenando una nueva ola de desguaces.