Un 60% en tonelaje de los buques pertenecientes a la flota operativa mundial y a la cartera de pedidos utilizan algún tipo de tecnología para reducir sus emisiones y favorecer la descarbonización del sector marítimo, según datos de Trevor Crowe publicados recientemente por Clarksons. Dicho porcentaje incluye aquellos buques aptos para el uso de combustibles alternativos; buques ‘ecológicos’, aunque propulsados por combustibles convencionales; y buques equipados con cualquier otra sistema de eficiencia energética (Energy Saving Tecnology, EST)
Crowe destaca como se ha prestado mucha atención a los pedidos de buques que pueden utilizar combustibles alternativos, que suponen aproximadamente un 50% en tonelaje de la cartera actual. Sin embargo, hace hincapié en que para cumplir los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), “otras tendencias de la flota, como la mejora de la eficiencia energética y la instalación de tecnologías de ahorro de energía, también contribuyen de forma importante”.
El análisis de Crowe divide el tonelaje total de la flota operativa y la cartera en cinco niveles ilustrativos, que ponen de relieve su contribución a la reducción de emisiones y en los que el analista ha evitado una doble contabilidad.
El primer nivel incluye el tonelaje apto para el uso de combustibles alternativos. El segundo lo compone el tonelaje denominado ‘ecológico’ (definido como buques con motor principal de inyección electrónica), pero que usa combustibles convencionales. El tercer nivel agrupa el tonelaje equipado con una o más tecnologías de ahorro de energía (Energy Saving Technologies, EST). Finalmente, el tonelaje restante o ‘no ecológico’ se divide en buques ‘jóvenes’ (aquellos que tienen menos de 15 años) y ‘mayores’ (los que tienen 15 años o más) correspondientes al cuarto y quinto nivel, respectivamente.
Según los datos, en el conjunto de la flota mundial y la cartera de pedidos, un 12% pertenece al primer nivel, un 39% al segundo nivel y un 8% al tercer nivel. Entre el 40% restante ‘no ecológico’, un 15% del tonelaje es menor de 15 años (cuarto nivel) y un 25% tiene 15 años o más (quinto nivel).
Trevor Crowe ha querido incluir dentro del tonelaje de bajas emisiones a todos los buques capaces de utilizar combustibles alternativos del primer nivel (muchos de ellos también ‘ecológicos’ y equipados con EST) y a todos los buques ‘ecológicos’ incluidos en el segundo nivel, ya que a las velocidades actuales consumen un 20% menos de combustible que las unidades ‘no ecológicas’.
Dejando a un lado los metaneros, que cuentan principalmente con motores duales y sistemas de turbina de vapor en las unidades más antiguas, los porcentajes totales de los dos primeros niveles están encabezados por los portacontenedores, con un 72%, y los buques para el transporte de gases licuados del petróleo, con un 68%. También los petroleros y los graneleros, a pesar de una adopción más limitada de combustibles alternativos, contribuyen a la reducción de emisiones. La cuota combinada alcanza un 52% en petroleros de crudo, un 46% en petroleros de productos y un 49% en graneleros. La cuota de la flota global es de un 51%.
Si se añaden las unidades del tercer nivel, equipadas con EST (que permiten un ahorro de combustible de entre un 5% y un 10% por tecnología), la cuota de la flota mundial y de la cartera de pedidos ‘verde’ se eleva hasta un 60%. En el segmento de buques portacontenedores esta porcentaje alcanza el 78%; en los petroleros de crudo el 65% y en los graneleros otro 60%.
Entre los niveles de tonelaje ‘no ecológico’, en el nivel cinco (más antiguo y como consecuencia más difícil de modernizar y de hacer más eficiente), destacan los petroleros de productos con un 35%, los car carriers (32%) y los petroleros de crudo (26%). El tonelaje de la flota mundial en este nivel es de un 25%.
Para Crowe, la transición energética del transporte marítimo llevará tiempo, pero estos datos ilustran contribuciones más amplias que los combustibles alternativos por sí solos a la reducción de las emisiones. “En el viaje a largo plazo hacia la reducción de las emisiones, cada paso es importante”, concluye Trevor Crowe.